Etiquetas alimentarias

Básicamente, las etiquetas alimentarias son pegatinas como las que se conocen de otros envases: botellas, latas, cartones. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el etiquetado de los alimentos respecte la legislación sobre alimentos etiquetados. A continuación encontrarás más información al respecto. Si se necesitan etiquetas alimentarias para latas, por ejemplo, la impresión de las etiquetas no difiere de la de otros productos de papel. La situación es diferente para las etiquetas de alimentos en las que el precio, la cantidad o la fecha de caducidad se imprimen posteriormente y de forma individual. Estas etiquetas se recubren con un barniz en toda la superficie en el último paso de producción para permitir la impresión posterior. Te recomendamos que solicites una prueba de impresión por adelantado para asegurarte de que las etiquetas puedan procesarse como deseas.

El requisito previo básico para el etiquetado de alimentos es el cumplimiento de la normativa de la ley de etiquetado de alimentos, que naturalmente también influye en los materiales y procesos de impresión utilizados. Por ejemplo, la parte frontal no debe tocar directamente el contenido. Asimismo, los envases de alimentos no deben imprimirse desde el interior. Las tintas de impresión de las etiquetas alimentarias deben elegirse de forma que, por un lado, sean resistentes a los efectos del contenido y por otro, no influyan ni cambien el sabor, el olor o el aspecto de los alimentos. De ello se deduce automáticamente que las etiquetas alimentarias no deben liberar en los alimentos ningún componente perjudicial para la salud. Puedes encontrar toda la información sobre el etiquetado correcto de tus alimentos en el sitio web del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Dirección General de la Industria Alimentaria).

En la producción de latas y tarros, las etiquetas alimentarias suelen aplicarse a máquina. Las etiquetas para envases de carne fresca con impresión posterior también se utilizan con frecuencia como etiquetas en bobina; luego se pueden aplicar manualmente o a máquina. En principio, las etiquetas en bobina han demostrado su utilidad para el etiquetado de alimentos. Como ya se ha dicho, el papel se utiliza sobre todo en la producción de etiquetas alimentarias. Sin embargo, etiqueta.es también ofrece películas impresas o etiquetas transparentes para el envasado de tus productos. Además del recubrimiento con laminado y el barniz protector, también están disponibles el estampado en caliente, el estampado ciego y el estampado en relieve. Para tus etiquetas puedes elegir entre forma redonda, cuadrada, circular o personalizada según tu modelo. Si quieres algo fuera de lo común, estaremos encantados de asesorarte sobre las posibilidades. Imprimimos papel, así como películas de color y transparentes, con la máxima calidad en procesos digitales y offset. Por motivos de calidad, no utilizamos la impresión flexográfica ni la inyección de tinta.

Las etiquetas para congelados no sólo deben ser resistentes al frío, sino también hasta cierto punto a la humedad, ya que hay que prever que se forme rocío o condensación en el entorno del producto. Por regla general, las etiquetas para congelación están hechas de película o papel sin madera y recubiertas de un adhesivo resistente a las heladas. Por tanto, son adecuados para temperaturas de hasta -20° C. También son necesarias etiquetas alimentarias especiales para los alimentos que contengan aceite o se conserven en aceite. Esto garantiza que el etiquetado quede intacto y legible aunque se produzcan fugas de aceite del envase alimentario. Si tienes alguna pregunta sobre estos temas, habla con nuestro equipo de atención al cliente. Si tienes alguna pregunta sobre nuestras etiquetas y opciones, puedes ponerte en contacto con nosotros de lunes a viernes de 9:00 a 17:00 h, por teléfono en el número +34 932 71 64 00 o por correo electrónico en info@etiqueta.es.